martes, 27 de agosto de 2013

Alcanzar la plenitud.



Creemos, después de varios cursos trabajando con ejercicios y conceptos, que tenemos la base necesaria para abordar nuevas metas, como puede ser: alcanzar la plenitud. Se dice que una persona está en su plenitud cuando su comportamiento es íntegro, intachable.

Para alcanzar esa totalidad que nos lleva a disfrutar de la plenitud hemos de identificar qué tenemos que “quitar” de nosotros y qué tenemos que “poner” en nosotros para ser plenos.

Pongamos un ejemplo: para ser pleno yo tengo que “quitar” la crítica y “poner” la alegría.

Sería bueno que cada uno de nosotros identificara, si es posible, 7 cosas para quitar y otras 7 para poner. Este podría ser el primer ejercicio del próximo curso. Durante el curso desarrollaremos los ejercicios que nos permitirán alcanzar la plenitud.


lunes, 19 de agosto de 2013

Comentarios para: “A tu ritmo”.



Lo importante en los ejercicios que nos ocupan es conseguir un nivel de vibración energética que nos mantenga en armonía.

Con los ejercicios del “nivel básico” y “nivel 1” conseguimos, por un lado, eliminar aquellas agitaciones que ocupan en nosotros lo cotidiano, como son la queja; la crítica y la sentencia. Por otro, desarrollar una predisposición para realizar todas nuestras acciones de manera coherente con lo que nos proponemos. A esto le llamamos hacer un uso correcto de la energía.

Con el “nivel 2” tratamos de poner en práctica la disciplina necesaria, así como dinamizar la energía para incrementarla. Esto lo hacemos mediante procesos creativos. Por eso hemos creado el “tema” galería y el “tema” poesía.

Por ahora daremos por “cerrada” la propuesta: “A tu ritmo”. Si alguna persona cree, o desea, avanzar más con estos ejercicios que nos escriba un correo solicitando nuevas entradas.

Antes de continuar avanzando es imprescindible alcanzar los objetivos propuestos con los ejercicios, de otra manera sería como construir un edificio sobre cimientos defectuosos.

Intentos para encontrar la realidad que soy.



Para poner orden, coloco una frase tras otra según llegan.
Ato los parloteos a los pensamientos baldíos, a aquellos que están huecos,
y los pinto de agitaciones naranja.

Mis yoes me ayudan a verme en lo más alto de la locura,
a verme como el mejor,
el perfecto y las angustias se despiertan para empujarme al vacío,
a la queja continua de mi existencia.

Acechan los miedos para cambiar el orden de las frases,
para pintarlas de negro, o tal vez, de azul cobalto.

¡Me aturde tanto el trabajo de verme!.

Ahora sólo ato oes para cubrir mi cabeza mientras duermen las voces que vienen del otro lado de las palabras.

jueves, 15 de agosto de 2013

No soy sin la palabra.



No se hablarte de la palabra sin palabras.
Mis emociones se amontonan para darte el gesto apropiado,
el signo idóneo para decirte sin decir.
Pero no puedo gritar ¡metamorfosis!.

Modelo con mi mente los vocablos más extraños,
los pinto de colores y cuelgo flecos azules para no olvidarlos.
Ando errante por los mares inhóspitos de la nostalgia,

Ato brevemente sonidos olvidados, pero no puedo gritar ¡escarabajo!.

Estoy solo sin la palabra.
No puedo crear tu silueta, ni tu porte, ni tu insistencia en decir ¡galgo!.

¿Cómo te creo ahora que mi razón ha olvidado decir ¡palangana!.

miércoles, 14 de agosto de 2013

En mí la palabra.



Callado, detrás de un suspiro interminable, dejo que lleguen las voces que te hacen vivir en mí.
No soy capaz de cogerlas, de mezclarlas con los gritos desordenados de mi impaciencia.
Con cuidado, las agrupo por incertidumbres, las etiqueto con colores violeta.
Después, se que no es posible poner orden en su agitación perenne,
se que se alteran cuando llegan las alondras dormidas.

No hay otro camino posible.
Sólo queda esperar a todas las luciérnagas que te alumbran y dejar que suene su voz queda.
Me llena de alegría su primera exclamación.
El grito contenido por el asombro.

No digas nada, no asustes a la esencia de ser.
Monótona es su letanía como un río de lava.
Monótono es su silencio en la escucha del viento.

Ya ha germinado la palabra y empieza a construirse el hombre.

Al otro lado de las palabras.



¿Qué soy si me quitan las palabras?.
¿Cómo puedo sujetar la idea de mí si no tengo tu respuesta?.
Deja que camine por los desiertos de la lluvia dormida,
deja que pinte los signos que te dan contenido.
Necesito clavar con mis sonidos la experiencia de tenerte.

Te he visto con un traje de melancolía bañada en sentires,
dando los últimos toques a tu discurso manido, a tu insistencia en ser.
Te he visto atando todos los nudos que tejen las estrellas y ya no quedan lazos para cubrir tu cabeza.

Ahora vas por los caminos sin sentido,
llevando preguntas encerradas en la razonable, esperando otras palabras,
buscando aquella melodía que salía de tu boca.

No se que hacer.
En silencio te dejo que llegues a mí para seguir viviendo.  

Ahora, ya no es.



Tengo ideas verticales que se hunden en el abismo,
sombras perdidas en los recovecos del pensamiento,
gritos contenidos en todas las palabras que intento expresar.
Tengo miedos atados a los juncos que tejen la consciencia,
como movimientos quietos al hablar de ti.
¿Quién eres, soy?.

Toco tu mano, mi mano.
Encuentro montículos de ideas consumadas en las yemas de tus dedos, que se desplazan si pienso en ti.
Ya no eres lo que eras antes,
antes de ahora, ahora, no antes.
No puedo sujetar el presente para hablarte de mí.

Soy y no soy. Este es el juego de la existencia.
Me abrazo para detener el tiempo y soy tiempo.
Me abrazo para sujetar el espacio y soy espacio.
Soy y no soy.

Tengo aquella palabra que dejaste olvidad antes, en otro presente.

martes, 13 de agosto de 2013

Intento definirme.



Las palabras, amontonadas, algunas veces tintadas de un negro raído y, otras, vestidas en tonos dorados, exultantes, como verdades inmaculadas, no me dejan ver la luz.

Tengo que parar los pensamientos para ver.
Tengo que parar las voces para oír.
Entonces aparece el espacio infinito que soy.

Ando sin rumbo por las lindes del conocimiento,
Atando sonidos sin significado,
sin el calor que me da tu presencia.

A veces, junto palabras sin contenido, vacías, y construyo la idea hueca del ser.

¿Dónde están todas las manos que modelan lo que eres, lo que soy?.
¿Dónde están las palabras que definen lo que no es?.

Miro, asombrado, el vacío inmenso de este presente que se va sin dejarme retales azules para soñar. 

viernes, 9 de agosto de 2013

Cuando tú eras yo.



Ibas vestido de arrogancia, de fanatismos enmascarados,
de razones fabricadas.
La ignorancia llenaba tu penacho de farfolla, de gritos, de sombras.
La creencia te aupaba a las torres de la torpeza, hasta que tu duda me encontró.

Hoy ya no queda rastro de ti.
He borrado todas las líneas marrones que te llevaban,
las que te conducían a la violencia y la pedantería.
Ya se ha ido de tu regazo el abuso baldío.

Ahora, desnudo, sin frases huecas, andas por la orilla difusa del mar.
Te buscas debajo de las líneas amarillas, de los cordones desatados, de los andares perdidos.
No busques más. Ya no eres.

Anoche me vi. Te vi.
Comprendí que la distancia inmensa que nos separa es el punto gris que llevas en la mejilla.

jueves, 8 de agosto de 2013

Sentir.



No se lo que es sentir.

Tengo que tocarme para sentir qué soy.
Tengo que palpar mi rostro, mi pecho, como lagunas de sal tibia.
Tengo que sentirte para poder tocarte, para llevar sombrero de ala ancha cuando te busco.

No se lo que es sentir.

Cuando palpo tu rostro me lleno de ti y, entonces, busco desesperado la existencia.
Aturdido extiendo mis manos y no estás, no saboreo tu piel, ni huelo tu esencia, ni oigo tu risa, ni veo tu cabello enredado en lirios blancos.

¿Qué es sentirte?.
¿Qué es llenarme de ti sin palabras que te definan?.
Cuando te encuentro, los corceles blancos se van sin prisas por las arenas movedizas de los pensamientos, y me llena el vacío.

No se lo que es sentir.

Esta noche buscaré el silencio para observarte,
para comprender la realidad en la que te fabrico.

miércoles, 7 de agosto de 2013

Al otro lado.



La figura se mezcla con las piedras bañadas de azules.
Está quieta, perdida en sus pensamientos, estando sin estar.
Quiero tocarla con mis manos, más sólo siento el frío de la espera infinita.

La miro de soslayo para sorprenderla, para atarla a mi retina y,
se esfuma con el primer pensamiento.
Trato de mantener su perfume aliñando las palabras con el volante de su vestido,
pero se esfuma si la respiro.
Sólo puedo observar su quietud perenne.

Para no asustarla ato mis movimientos, mis anhelos, mis sueños,
y dejo que se fundan con la palabra no pronunciada.
Sólo en el silencio del presente sin límites puedo ser yo.   

lunes, 5 de agosto de 2013

Creándome



No hay nada.
La arena ya no se tapa con las sombras perdidas.
Ni la soledad se queja en silencio.
Ni hay recuerdos zurcidos al tiempo, ni carmín para los labios dormidos.

El silencio se hace nada.
Aunque no pierdo la esperanza de crearte nuevamente.
Por eso amontono en tu recuerdo todas las nostalgias.

Ahora observo fijamente la otra orilla.
Lanzo pensamientos como dagas que se clavan en ninguna parte.
Sujeto con fuerza las formas torcidas de la sociedad.
No hay nada, pero mi voluntad te crea en mis sueños.

sábado, 3 de agosto de 2013

Cómo hablarte de mí.



Aparta todas las letras que hay en el imaginario colectivo.
Aparta los sonidos que reiteradamente entorpecen tu vista.
Deja que se vayan, que no vuelvan en las tardes pintadas de naranja.

Pon tus manos al descubierto, déjalas como abanicos en reposo.
Que no digan nada tus pensamientos, ni tu voz, ni tu gesto contagioso.
Deja que todas las voces se apaguen, deja que se vistan de olvido.

Ahora cierra los ojos y pon tus sentidos al descubierto.
Cuelga hojas de laurel, pétalos de rosas peinadas y silencios.
Nota como la brisa de la templanza te envuelve y escucha.

Soy lo que sientes. Todo lo demás es falso.