Podríamos decir que la atención es la capacidad que tenemos
para relacionarnos con cosas externas e internas. Si miras a tu alrededor verás
que sólo puedes establecer relación con aquello a lo que prestas atención. Te
das cuenta que tienes que dejar una cosa si quieres tratar efectivamente otra.
En el momento en que nos fijamos en algo, en el momento que le
prestamos atención, establecemos un nexo de conexión entre ese algo y nuestra
energía. La energía establece un tipo de vibración respecto a ese algo
dependiendo de nuestra intención. Puede ser que nos sintamos bien o mal, o tal
vez no tenga ningún interés y pasamos nuestra atención a otra cosa. Si la cosa
objeto de nuestra atención es de nuestro interés concentramos, en esta cosa,
nuestra atención dando continuidad a la conexión mediante la fuerza de voluntad,
de esta manera acumulamos energía en el motivo de nuestra atención.
Si aceptamos lo expuesto, diremos que cuando establecemos
una relación con algo externo o interno ponemos en marcha la atención, la
intención y la voluntad.
El Poder Personal reside en la
voluntad, y la voluntad es la acumulación de energía disponible. La voluntad
nos mueve a hacer cosas de manera intencionada, por encima de las dificultades,
los contratiempos y el estado de ánimo. Cuando persistimos en un propósito
determinado, muy bien definido, que no puede ser anulado por deseos o intereses
en conflicto aparece el intento inflexible y con él el Poder Personal. No es
necesario alcanzar esos niveles de concentración de la energía para disfrutar
de los poderes de la voluntad. Con la voluntad bien desarrollada puedes hacer
lo que quieras, cuando quieras. También podríamos considerar el intento
inflexible como la fuerza engendrada mediante la atención concentrada. Por otro
lado, la falta de fuerza de voluntad, la falta de energía, se constituye en
obstáculo en la búsqueda de una vida más sana.
Por eso recomendamos realizar el ejercicio “Centrando la
atención”. Este es uno de los primeros ejercicios que nos encaminan a disponer
de Poder Personal. Con este ejercicio desarrollamos la atención, la intención y
la voluntad. Esta última frase puedes utilizarla para hacer un ejercicio de
reflexión.
Mirar la pestaña “Ejercicios”. Seguiremos hablando
de la atención, la intención y la voluntad.
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